"Los conca'ac son la gente del desierto y el
mar, pueblo vivo que proviene de historias y viajes milenarios del aliento de
los hohokam"
INTRODUCCIÓN
México
es considerado como uno de los países con mayor riqueza cultural del mundo,
este hecho es resultado de su multiculturalidad, la cual es producto de la
existencia de más de 60 grupos étnicos indígenas residentes en la república
mexicana.
En el
presente trabajo tiene el propósito de caracterizar a uno de los pueblos
indígenas que aún habitan en este país: los SERIS.
Los
seris se llaman a sí mismos Konkaak, lo cual quiere decir en su
lengua "la gente". El término seri proviene en cambio de la lengua
yaqui y significa "hombres de la arena".
HISTORIA
El
territorio konkaak tenía, antes de la llegada de los españoles, como límites
naturales el mar, las cadenas montañosas y el desierto de Encinas. El área que recorría el grupo abarcaba lo que actualmente
son catorce municipios de Sonora, pues era un pueblo nómada cuya movilidad
giraba en torno a los recursos acuíferos y a los ciclos de la flora y fauna.
En la
época prehispánica estaban organizados en seis bandas, divididas a su vez en
clanes. No existía jefe de clan ni de banda, y sólo era nombrado para cumplir
tal función el individuo más capacitado en épocas extraordinarias, como la
guerra. La mujer tenía un papel económicamente importante, pues se encargaba de
la recolección, por lo cual estaban organizados en clanes de estructura
matriarcal.
Durante
el periodo colonial, los contactos más estables se dieron entre los seris y los
jesuitas, quienes intentaron concentrarlos en pueblos para evangelizarlos y
enseñarles labores agrícolas. Ninguno de sus esfuerzos tuvo éxito y los seris
siempre regresaron a la vida del desierto, por lo que fueron considerados como
un grupo belicoso, dedicado al pillaje, robo y matanza del ganado de los
blancos.
Los
seris nunca fueron formalmente conquistados y, menos aún, evangelizados y
pacificados. Poco a poco fueron confinados a la parte más inhóspita de su
territorio; diezmados y obligados a aceptar intercambios no siempre ventajosos
con los colonizadores no indígenas.
Ya para
el periodo independiente se había desarticulado el sistema de organización de
bandas y habían perdido casi la totalidad de sus dominios en la tierra
continental. A lo largo de los dos primeros tercios del siglo XIX fueron
perseguidos y prácticamente aniquilados tanto por los soldados como por rancheros
mexicanos. Algunos de los seris lograron huir y refugiarse en la isla Tiburón.
La
escasez de agua y animales para la caza, fueron los factores predominantes para
que los seris abandonaran su refugio en la isla Tiburón y volvieran a
incursionar en tierras continentales.
Desde
ese momento, los seris empezaron a tener como elemento esencial de su economía
el intercambio comercial y la utilización del dinero en sus operaciones de
mercado. Con ello se suceden con mayor velocidad y
profundidad los cambios en su estructura organizativa y cultural.
A su
retorno de la isla Tiburón los seris se establecieron a lo largo de la costa,
hasta que en 1936, Lázaro Cárdenas, promovió su organización en cooperativas de
pescadores, les proporcionó el equipo necesario y los concentró en el poblado
de Bahía Kino.
En 1975,
Luis Echeverría declara el Canal del Infiernillo como zona de pesca exclusiva
seri, y les otorgó simbólicamente como posesión comunal la isla Tiburón,
decretada a su vez como zona de reserva ecológica.
UBICACIÓN GEOGRÁFICA
Actualmente habitan en
dos localidades de la costa desértica del estado de Sonora: Desemboque,
municipio de Pitiquito, y Punta Chueca, municipio de Hermosillo.
Periódicamente y de
acuerdo con los ciclos de pesca, radican también en diversos campos pesqueros
distribuidos a lo largo de su territorio de aproximadamente 100 km de litoral.
El territorio konkaak comprende un área aproximada de 211 000 ha al nivel del
mar, y está integrado por una parte continental y por la isla de Tiburón.
LENGUA
La lengua de los konkaak
tiene sus raíces en la estirpe Caita y
Siux Hokano. Sin embargo, la lengua seri forma parte de la familia
seriyumana, lo que significa que su relación más estrecha y reciente se
encuentra con el yumano de la parte norte de la península de California, además
de que esta lengua contrasta totalmente con los idiomas uto-aztecas, como el
pima, o el pápago. Actualmente la mayoría de la población es bilingüe y, en
algunos casos, hasta trilingüe, pues además del seri hablan español e inglés.
Los seris mantienen su
lengua con gran vitalidad y en lugar de adoptar términos del español para
designar los nuevos elementos culturales que se han agregado a su vida,
continúan creando términos nuevos.
Poema anónimo.
Ant koom tanoj i yai yah
Amimi tanoj i yai yah iti
Xonoj tee antisiijiim konik
Amossaat xoe yah iti xonoj.
Ant koom tanoj i yai hah
Amimi tanoj i yai yah iti xonoj tee antisiijiim kmiki
Konik amossaat
Xoe yah amimitanoj i yai
Yah iti xonoj tee
Todo el
mundo encendido.
El
cielo también se encendió.
Va a
haber un terremoto.
La
caguama aplacará todo.
La
caguama quiere volar.
Otra
vez el mundo se va a acabar.
Por eso
quiero volver.
VESTIMENTA
La
vestimenta de la mujer seri consiste en una blusa de manga larga abotonada al
frente, llevando a la altura de la cintura un vuelo u olán que define la
esbelta figura de las jóvenes. La falda es larga y el ruedo tiene adornos de
cintas en colores contrastantes, así como en los puños y el pecho de la blusa.
Llevan el cabello largo.
Se
adornan con los típicos collares elaborados por ellas mismas con huesos
pequeños de pescado, chaquiras, semillas silvestres, conchas, caracolillos y en
algunas ocasiones especiales añaden figuras pequeñas talladas en madera
palofierro o piedras semiduras.
También
se adornan con cintas hechas para ocasiones especiales ó durante las fiestas
tradicionales de la tribu; las mujeres utilizan la pictografía facial que
distingue a este grupo, pero esta
costumbre ha ido cayendo en desuso.
ALIMENTACIÓN
En la
actualidad la alimentación de los Seris es muy deficiente, aunque consumen
pescado y mariscos, han sido muy influenciados por la cultura consumista que
les llevó alimentos “chatarra” como son sopas instantáneas, latas, sabritas,
gansitos y sodas; sin embargo en su dieta ya se encuentra frijol, harina, leche
y un poco de fruta y verdura; en épocas anteriores la dieta tradicional no se
cocinaba. Los ancianos platican: “Antes en el monte había mucha comida muy
bonita, sabrosa y eso nada más comía la gente: Pitahayas, raíces, la flor del
mezcal y la choya se tatemaban, fruto del sahuaro, viznaga, péchitas del
mezquite, venados, conejos, liebres. Ahora las personas comen comida de la
tienda, muy mala no da fuerza”.
VIVIENDA
En los
campos pesqueros todavía es posible encontrar casas tradicionales. Son
paravientos de hierbas acomodadas encima de un armazón de ocotillo, doblados y
amarrados, los cuales forman una especie de túnel. Sirven para una sola familia
y son adecuados para una vida nómada. En los poblados, las casas son
mayoritariamente de block, concreto y techo de lona o asbesto, aunque es
posible todavía encontrar algunas viviendas de madera, adobe o ambos con techos
de lámina de cartón. Por lo general constan de cocina, comedor, baño y uno o
dos dormitorios.
RELIGIÓN
Los
seris no desarrollaron un sistema de gobierno religioso-festivo muy complejo.
Su interpretación del mundo, sus ritos, sus fiestas y demás manifestaciones
culturales tienen un carácter estrechamente relacionado con la naturaleza y con
los aspectos biológicos y sociales de la reproducción del grupo.
Así,
sus principales ritos están vinculados con el nacimiento, con el inicio de la
pubertad y con la muerte; sus canciones y relatos giran en torno al mar, los
tiburones, las zorras y las antiguas hazañas de héroes y guerreros. Al no haber
sido evangelizados formalmente, carecen de los elementos católicos que se
encuentran en otros grupos indígenas.
En la
zona seri no hay ninguna iglesia católica ni sacerdotes de este culto. Existen
dos templos protestantes. A pesar de todo, mantienen en su lengua y sus
prácticas esa matriz cultural que los asocia directamente con la naturaleza.
Según su
filosofía, si ellos tocan un objeto, su esencia se les transmite,
convirtiéndose en su pertenencia, por lo cual no lo desecha como basura.
Maquillaje tradicional Seri
FIESTAS RELIGIOSAS Y PAGANAS
Sus
principales fiestas siguen siendo las de la pubertad, la llegada de la Caguama
de los siete filos, los ritos de muerte la Fiesta de la Canasta Grande (o
Saaptim) y la Fiesta de Año Nuevo (el primero de julio, en la primera noche de
Luna Nueva). Para la organización de sus fiestas continúa presente la
cooperación de los miembros de la tribu (amaj).
Para
sus ceremonias emplean zumbadores de madera, sonajas de hojalata, percutores
hechos con jícaras invertidas sostenidas sobre agua y el omichihuatli, que es
un raspador o palo estriado que se raspa con otro para que suene sobre la
vasija invertida.
También
tienen un maquillaje para diferentes momentos dentro de sus fiestas que duran
cuatro días con sus noches. La pintura facial Conca´ac es un
exquisito diseño de líneas delgadas, rematadas por puntitos en el rostro
humano. El dibujo cruza la cara sobre las mejillas y la nariz, pasando por
debajo de los ojos. Los colores son rojo (que significa la muerte), el blanco
(la suerte) y el azul (el mar).
FUENTES DE TRABAJO
La
pesca es la actividad económica fundamental y proporciona al seri ingresos muy
superiores a los de la mayor parte de los grupos indígenas del país, los que
invierte, sobre todo, en la adquisición de vehículos y su mantenimiento y en la
compra de artículos suntuarios. Se dedican además a actividades mecánicas.
La
elaboración de artesanías, para el mercado turístico es una actividad económica
importante en la actualidad. Los hombres seris han aprendido el tallado en
madera. Confeccionan esculturas zoomorfas estilizadas, que representan animales
marinos y terrestres hechas con corazón de mezquite y palo-fierro con alta
demanda en el mercado.
Son
pescadores, artesanos, cazadores y recolectores de frutos del desierto. Desde
chiquitos todos recolectan los materiales, como son conchas, caracoles, flores,
semillas, fibras, maderas y vértebras de víbora y tiburón. Los frutos del
desierto que consumen son: la jojoba, las tunas de choyas, las pitahayas y
ostras en la playa.
Los
seris no acostumbran salir de su territorio en busca de trabajo, y aun dentro
de él, difícilmente aceptan contratarse como asalariados; nunca han aceptado la
existencia de un patrón, un contrato por horario y la asignación de tareas
preestablecidas y definidas por otros.
PATRIMONIO TANGIBLE
Aunque
no es precisamente una zona arqueológica, los seris, si poseen la propiedad de
la Isla Tiburón la cual ha formado parte de su territorio desde la época
prehispánica.
Es la
isla más grande de la República Mexicana (1 200 km2).
Se
localiza en el Golfo de California o Mar de Cortés, frente a la costa de Sonora
y separada de ésta por el Canal del Infiernillo. Su nombre se debe a la gran
cantidad de tiburones que buscan alimento en los bancos de pequeños peces de
sus costas.
Cuenta con dos zonas montañosas en dirección norte-sur llamadas Sierra Menor y Sierra KunKaak, donde se ubica la altitud máxima del lugar de 800 metros.
Cuenta con dos zonas montañosas en dirección norte-sur llamadas Sierra Menor y Sierra KunKaak, donde se ubica la altitud máxima del lugar de 800 metros.
La Isla
Tiburón es una reserva especial de la biósfera que los Seris, etnia que vive en
Sonora, tienen como propiedad comunal, es decir que pueden realizar actividades
pesqueras y de recolección. La isla es vigilada por personal de la Secretaría
de Marina distribuido en tres campamentos: Las Cruces, El Tecomate y Punta
Tormenta.
No
obstante lo anterior, existe sobreexplotación pesquera por barcos camaroneros,
sardineros y pequeños pescadores. En tierra firme se presenta sobreexplotación
de especies vegetales para la fabricación de carbón vegetal y la caza no
regulada.
Por ser
una zona protegida está prohibido el acceso a la isla, sin embargo en
Hermosillo, capital del estado de Sonora se puede tramitar un permiso para
visitarla.
Hay
arroyos (ríos pequeños) en toda la isla, entre los principales Tecomate, San
Miguel del Carrizal, del Chalate y de KunKaak.
ECOREGIONES (BIODIVERSIDAD)
El
territorio actual de los konkaak tiene una superficie total de 211000 ha, de
las cuales 91 000 fueron dotadas por la vía ejidal y 120 000 por vía de
dotación comunal.
Los
suelos son por lo general delgados, en algunas partes hasta con un 80% de
pedregosidad, y, aun cuando hay áreas con dunas, éstas son pobres en nitrógeno
y materia orgánica. Por su textura, los suelos son de tipo francoarenoso y
arenoso en los valles. Por sus características permeables no cuentan con ríos,
lagos o corrientes importantes, salvo el río de San Ignacio, que nace en la
sierra cercana y desemboca cerca de Desemboque, pero que es temporal y de poco
caudal. La isla Tiburón está provista de cinco aguajes que no son suficientes
para sostener a la población seri. Los flujos hidráulicos subterráneos que
pudieran llegar a la altura de Punta Chueca son previamente explotados por los
colonos de la costa de Hermosillo mediante pozos profundos y captaciones de la
presa Adalberto Rodríguez.
En esta
región, el clima es caluroso con precipitaciones pluviales de 75 a 200 mm por
año; el principal tipo de clima es sumamente seco o desértico. Es posible
registrar temperaturas mínimas de 8.5°C bajo cero en los meses de diciembre a
febrero y de 49.5°C entre los meses de junio y agosto. Con tales
características, el desarrollo de la agricultura ha sido hasta ahora imposible
y aun la ganadería se ha topado con dificultades, pues el índice de agostadero
es de 50 a 60 ha por cabeza de ganado y sin manantiales o pozos de agua. Por
tanto, la principal fuente de aprovechamiento de sus recursos sigue siendo los
casi 100 km de litoral que poseen para su uso exclusivo. Pese a la aridez del
desierto que habitan, los seris aprovechan la flora y la fauna de la zona.
CIBEROGRAFÍA